de romería



Observación del (24/04/2009)

Tras varios fallidos intentos de ponernos otra vez en marcha, por fin pudimos llevar a cabo nuestra salida en el Año de la Astronomía, que meteorológicamente hablando no se está portando tan bien. Por otro lado, fue una salida con sorpresa incluida, puesto que al salir de Écija a las 20:20h y llegar sobre las 21:10h al sitio de siempre, nos tropezamos con que había organizada allí una romería en toda regla. Con lo que tuvimos que poner rumbo a otro lugar.

Por suerte no perdimos mucho tiempo en encontrar un nuevo emplazamiento, que sería unos kilómetros carretera arriba. A eso de las 21:30h teníamos nuestros bártulos dispuestos. Hicimos un breve recordatorio de cómo poner el telescopio en estación. De los dos telescopios de los que disponíamos, uno de ellos (el refractor) se iba a utilizar íntegramente para medir estrellas dobles y el otro telescopio, para buscar los objetos más interesantes que nos proporcionara la noche.


Nuestro primer objetivo fue el planeta Saturno con el telescopio SC, al cual se le veían perfectamente dos de sus lunas. Tras esto nos dispusimos a hacer un viaje por todas las Messier de las que dispusiéramos en la bóveda celeste.














Mientras tanto en el otro telescopio, unos cuantos atrevidos se disponían a adentrarse en el mundo de las dobles. Con nuestro catalogo de estrellas de referencia en una mano y nuestro listado de dobles a medir en la otra, nos pusimos manos a la obra. La tarea resulto más difícil de lo esperado, ya que nuestro primer objetivo se nos resistió (STF 1812 de la Constelación del Bollero), aunque finalmente apareció, si bien la mar de desmejorado por el intenso viento que hacía en la noche y las numerosas nubes que se cruzaban por el cielo, que lejos de facilitar la labor, la entorpecían. Luego buscamos otro conejillo de indias, que no fue otro que el conocido sistema de estrellas dobles formado por Mizar y Alcor (que en realidad es un sistema triple). Estas estrellas se nos resistieron mucho menos y tras el primer paso de identificar el movimiento, los puntos cardinales y el cuadrante en el que ubicar el ángulo de posición, nos dispusimos a medirlo. Para ello contamos con la mas alta tecnología artesanal (tengo que decir que con una precisión abrumadora). Y aquí un servidor hizo la medición y “tan sólo” erré en unos 10º, nada mal para ser mi primera vez.


La noche empeoraba por momentos y tras nublarse una parte del horizonte nos cayeron unas gotas. Con lo que no esperamos mucho para recoger y marcharnos. Llegamos a Écija a eso de las 2h, tras haber matado el gusanillo después de tanto tiempo.

José María Rivera Medina 2ºBach